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| Izda.: Pilar Lachén Dcha.: Cochy Cosculluela (protagonista) |
Tras
más de 20 años como vidente en Barbastro, Conchy Cosculluela, ha decidido
escribir sus experiencias y las ha reflejado en el libro. La obra ha recopilado alrededor de 50 historias. Cosculluela y Lachén
se conocieron a través de una red social.
La
escritora quiso entrevistarla personalmente, y ha contado que fue entonces
cuando Conchy le “echó las cartas y me dijo que mi padre, fallecido hacía un año
y medio, me había dejado algo para que se lo guardara".
Ha
continuado explicando Pilar Lachén, que iba a responderle cuando la vidente
añadió que, “años antes, me había regalado otra cosa igual y también la
llevaba, se trata de dos alianzas de oro. Quién, excepto mi padre, mi marido y
mis hermanos sabían este hecho, que años antes, con oro de unas muelas que se
le habían caído a mi padre me hice una alianza”.
“Confesiones
de una bruja”, está basado en pequeños relatos sobre las historias que ha
vivido Conchy Cosculluela. “La finalidad de este trabajo es intentar dar alguna
esperanza a las personas, ayudarles a buscar la respuesta a sus preguntas, de
aprender a disfrutar del momento y ver el lado positivo de la vida", ha
explicado la vidente.
Yo como administrador del presente blog y la página facebook de MI RINCÓN MÁGICO, le ofrecí promocionar su libro aquí y a la misma vez compartir con tod@s vosotr@s un libro el cual relata la vida y vivencias de una bruja de nuestro tiempo, una bruja buena que le gusta ayudar a la gente sin ánimo de lucro y en momentos difíciles como los que vivimos hoy y con diversos problemas a los que ella encuentra remedio u orientación por el buen camino.
Desde este post o artículo le deseo toda la suerte y éxito que se pueda desear al trabajo y esfuerzo de Pilar y a su protagonista mi amiga Conchy...
[...]
En aquellos tiempos, la diabetes no era el simple hecho de con un bolígrafo inyectarse insulina; una persona tenía que acudir a diario a su casa para proporcionársela. Esa persona era una monja, encargada por aquel entonces de aquellas labores.
Un día comenzó a llorar y a suplicar a su madre que avisara a la monja para que no fuera. La madre, como es natural en todas las madres, no hizo caso de aquella niña, podría ser el miedo a otro pinchazo, el cansancio a enfrentarse diariamente a la enfermedad, pero tanta fue la insistencia de la pequeña que preguntó el porqué de aquella negativa. La pequeña respondió que si la monja acudía a su casa iba a morir.
La madre, perpleja ante lo que acababa de escuchar, no hizo caso y continuó con sus labores.
Cuando se acercaba el momento de la llegada de la monja se escuchó un fuerte ruido y gritos en la calle: un camión que había perdido el control arrolló a la monja, que murió al instante.
[...]
"Confesiones de una bruja".Cuando todo empezó.
Te conjuro, espíritu del Mal, para que no te acerques a este blog, ni a su autor, ni a su familia; y que te alejes de esta medalla de San Benito bajo cuya protección y amparo ha sido colocada; en el nombre de Dios Padre Omnipotente, que hizo el cielo y la tierra, el mar y todo lo que en ellos se contiene. Asimismo, que desaparezcan y se alejen de esta medalla toda la fuerza del Adversario, todo el poder del Diablo, todos los ataques e ilusiones de Satanás, a fin de que todos los que la usaren gocen de la salud de alma y cuerpo. Amén. Así sea.
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